13 ene 2012

Magia

Me enamoré perdidamente. Es increíble lo que me provoca, camino por la calle lo más rápido que los músculos me permiten porque la ansiedad por verla me domina. Abro la puerta y ahí está. Me mira, nos miramos, se nos ilumina la mirada. Corre hasta mis brazos, se cuelga y me abraza. De ahí en más son puras sonrisas. Uffffffff... cómo puedo quererte tanto enanita.

No hay comentarios: