6 sept 2010

Cómo te explico... igual creo que no entenderías

Es una mezcla de sensaciones: nostalgia, ansiedad, orgullo, miedos, cansancio, incertidumbre y felicidad por nombrar algunas. La sensación más clara es la de "nadie, excepto mis compañeros, me entiende". Y para ser franca, creo que es una realidad. Al margen de la susceptibilidad hay algo de cierto en esa incomprensión. Mínimo siete años, y alguno más la mayoría, hace que andamos en este camino. Por eso ahora que llegamos al final nos hacemos chaleco, ambo, y si pudiéramos, bufandas y musculosas que nos identifiquen, porque estamos orgullosos y a la vez incrédulos de a donde llegamos. Claro, pasamos gran parte de nuestras vidas viéndonos las caras más frecuentemente que a nuestra familia, novio y amigos extra - facultativos... ¿y ahora? Ahora, o a la brevedad, a vivir se ha dicho.

No hay comentarios: