15 mar 2010

Decisiones

Cuando me encuentro agotada y a punto de quejarme de todo, me planteo cuántos de mis posibles reclamos fueron elecciones mías absolutamente concientes. Así, lo que era una queja pasa a ser una sonrisa de agradecimiento porque me considero afortunada de poder vivir la vida que elijo.
No escribo estas líneas como ejemplo de nada, sólo lo hago para tener el concepto siempre presente antes de arrugar la frente y hacer puchero...

No hay comentarios: